lunes, 24 de diciembre de 2007

 

El regalo de Navidad

Bueno, pues como todos los años, nuestra empresa nos ha hecho un regalo de Navidad a todos los empleados.

Este hecho siempre nos llena de expectación, porque suelen mantener el secreto hasta casi el último momento, y este año, hasta que se supo, la verdad es que generó expectación, ya que era un regalo que te lo llevaban a casa, no se podía ir a buscar a la oficina. Así que las especulaciones comenzaron por una gran cesta de Navidad...

Pero no, pronto se supo que no sería algo de comer, así que ya surgió la primera decepción. Se habló de que podrían ser un juego de maletas, pero eso ya fue regalo hace algunos años, y no hubo mucho contento, hasta que se supo cuál iba a ser el verdadero regalo: una bicicleta.

Y aquí división de opiniones. Un 80% echando pestes del regalo, y otro 20% que no nos parecía mal. Las razones del 80%, obvias:

Y las razones de los que nos agradaba el regalo, sencillas: no tenemos bici, tenemos sitio para guardarla, y a caballo regalado, no le mires el diente.

Hasta que llegó a casa la dichosa bici. ¡MENUDA MIEEEEERDA! Muy bonita con el color verde corporativo (supergayer, pero original al fin y al cabo), pero joer, me pongo a montarla, y para empezar, las instrucciones en italiano. L'italiano somiglia più semplice quando è ascoltato. Después de leerlo someramente, monto el manillar y paso a lo siguiente, donde descubro que el manual no habla de cómo separar los frenos para meter las ruedas. Empiezo a mirar el mecanismo, y de puta madre, había que desmontarlo para poder meter la rueda delantera.

Bien, después de buscar entre las herramientas (la mías, no las que vienen con la bici), logro desmontar el freno, meter la rueda, y volver a montarlo. Ahora toca calibrar la rueda. Los frenos, malos como redios, impiden que la rueda pueda caer a su amor, así que hay que calibrar una de las zapatas, pero ¡oh sorpresa, campos de soledad, mustios collados!, no hay manera. Así que nada, o dejo la rueda un poco suelta, o llevo la bici a una tienda a que me la calibren, lo que me costará pasta.

En fin, pasemos a montar el sillín. Bueno, eso de sillín es un decir. Plástico duro ahí. Total, como los consultores ya tenemos callo en el culo de lo mucho que nos dan por él, pues da igual que el sillín sea un destrozabajos. Me consuelo con que al menos poniendo pasta se podrá cambiar...

Y bueno, ya que logro montar todo, voy a probar los cambios. No he visto unos cambios tan malos en mi vida. No hay tope a la hora de bajar piñones, ¡¡lo que hace que la cadena se salga!! Los cambios del plato, tampoco son halagüeños, la cadena solo cambia después de que el cambio literalmente la empuje al siguiente plato, con la consiguiente rascada metálica.

Y encima he leído que para abril quieren hacer una marcha solidaria con las bicis de los 4000 empleados que somos. Ojalá desistan de la idea, porque si logran reunir a 300, será un logro. 300. Sólo los fuertes. Sólo los recios...

En fin, que creo que lo que mejor puedo hacer con esta joyita de bici es regalársela a alguien que la quiera y no la vaya a usar mucho (no sea que se mate por los putos cambios) o venderla.

Y si alguien de esta mi empresa lee este artículo, por favor, que siga este consejo: Volved al jamón o a las cestas de Navidad. Pueden no ser regalos originales, pero nos gustan a más del 90% de la plantilla. No seais como ZP, que por satisfacer a unos pocos, joden a la mayoría (véase el canon para sus amigos artistas trapecistas, por ejemplo).

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viernes, 21 de diciembre de 2007

 

Rotura de peroné (VI)

Bueno, pues hoy he vuelto al médico, y me ha dado una mala noticia: seguiré de baja hasta finales de enero. Ya veis en la foto como el hueso sigue sin soldarse del todo por detrás (en la radiografía lateral se ve claro)

Sí, ya sé que muchos de vosotros pensaréis que qué cabrón, que qué suerte y demás, pero joer, es que ya uno se aburre de la inactividad, el cuerpo me pide chicha, y cuando me reincorpore, verás tú qué gracia a la hora de coger rito intenso de curro otra vez...

De cara a la lesión, pues el médico me ha dicho que va bastante bien, pero que del 12 de octubre al 12 de enero son 3 meses, y él me dice que hasta finales, agua. Sigo sin poder correr ni hacer otro deporte que no sea andar, natación, o mis ejercicios de rehab. Y ahora aparte tengo que ir a una clínica de rehabilitación para ejercitar el tobillo, que es lo que más molestias me da.

En fin, que sí, más tiempo para mi, pero un rollo, que ya me había hecho a la idea de tener el alta para después de Navidades.

Pos nada, habrá un capítulo VII de esta historia, je.

Hasta pronto!

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martes, 18 de diciembre de 2007

 

Muebles

¡Hola chavales!

Bueno, el viernes vuelvo al médico para la penúltima revisión (si el de arriba quiere), así que hasta ese momento me estoy aplicando a hacer ejercicio con el tobillo, como me mandó.

¿Y cómo lo estoy haciendo? Sencillo, pateándome tiendas de muebles, que tengo que amueblar mi casita, y joer, yo creía que esto de comprar muebles era más sencillo, pero se ve que no... Felices aquellos tiempos en los que el homo sapiens vivía en cavernas, donde toda su preocupación era si pintaba bisontes con sangre de conejo o mezclada con arcilla...

Para empezar, había que buscar lo básico, a saber, dormitorio principal y sofá. Para lo primero, pues es básico saber qué tipo de dormitorio quieres, si clásico, moderno o rústico, luego el color, mesitas de noche, y xinfonieres, que hay de varios tamaños, cómo queda la habitación... Vamos, un cristo.

Por lo menos para ver el espacio de habitación, hay un progamita muy recomendable para aquellos que no sabéis o no os apetece usar el autocad. Se llama Room Arranger, y de manera muy rápida te puedes hacer un plano de tu casa, cascarle muebles con la medida que quieras e incluso darte un paseo en 3D.

Así que después de ochocientas medidas me pude hacer el plano y ver cómo me quedarían las habitaciones. Después de eso, y de verme 200 dormitorios sin que me gustase ninguno, decidí que sería más sencillo ir a por la habitación de invitados, quitármela de enmedio y tener un sitio donde dormir llegado el caso.

Con el sofá, os recomiendo que vayáis a MakSofás, tienen un huevo expuestos, y, aunque no son de la mejor calidad, os hará una idea de en qué tipo de sofás vuestro culito estará cómodo. Importante mirar también los reposabrazos si sois de los que os tumbáis en el sofá!

En fin, que con el sofá tres cuartos de lo mismo, que si hay que mirar el largo de la pared, la profundidad para que no achique demasiado el salón, la altura que no dé con las llaves de la luz... Y por último la tapicería. Jooodeeeeer, menos mal que esto se hace una vez cada mil años, que sino me da algo.

El colchón, otro mundo. Consejo, id a El Corte Inglés, a la sección de colchonería, y probadlos. Como resumen os diré que elegí un viscoelástico de Pardo. Si queréis info, ya sabéis, dejad abajo un comentario y con gusto os cuento mis experiencias con señales (pero sin pelos, que me quedan pocos!)

Hale, pues una vez elegido todo, voy a por el mueble del salón. Y aquí no hay nada fijo, esto va como si fuera un mecano y te montas lo que mejor te venga, así que hala, a tirar otra vez de Room Arranger y a poner tablas a ver cómo me queda el dichoso mueble. Estoy hasta las pelotas, pero bueno, se me pasa el agobio cuando voy a casa y veo lo mucho lo que me queda por limpiar después del desastre que me hizo el pintor...

Esa es otra, el pedazo de cabrón del pintor, me hizo un trabajo con millones de defectos, y lo que es peor (porque los defectos los puedes tapar con cuadros), yo no sé cómo cojones cubrió las cosas, pero los pocos muebles que tenía, y prácticamente todas las partes de los baños y puertas han acabado hasta arriba de pintura, menudo cerdo. Y eso que acuchillé, porque el suelo era para verlo, tenía que haber sacado fotos.

Y en esas estoy, con molestias aún en mi piernecica, pero ya mucho mejor, a eslomarme a limpiar para que cuando lleguen los muebles tenga toda la casa limpica, reluciente y lista para estrenar, jejeje.

Hottia, acabo de caer que cuando tenga todos los principales, tendré que pasar a arrasar por el Ikea a comprar el resto. ¡¡¡NNNnnnnnnooooooooo!!!

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lunes, 3 de diciembre de 2007

 

Veintidiez

Pues sí, mañana será el primer aniversario de mi vigésimo noveno cumpleaños, y eso es como cerrar el ciclo simbólico de los veinte que te hace pensar que aún eres más joven que viejales, pero en fin, a uno ya le empiezan a llamar de usted, hace tiempo que mi frente pasa frío en invierno, y bueno, como ya habréis leído, me rompo con más facilidad.

El caso es que pensando lo que he hecho estos años, pues estoy bastante satisfecho de dónde estoy. ¿Podía estar mejor? Pues sí, y seguiremos intentando estarlo, pero no me quejo para nada de lo que tengo.

El otro día, en un rato de ociosidad, me puse a poner chinchetitas en el Google Earth a todos los lugares donde había estado, y tras un laargo rato cascando chinchetas y fechas, me salió lo que veis.

Joer, viendo esto, y otras 3 chinchetas que están cruzando el charco, en Nueva York, L.A. y Las Vegas, uno no puede menos que pensar en la suerte que tiene, de conocer tantos lugares distintos en 29 añitos y 364 días. Y como ya sé lo que dirán Rabanero o Carranza (piensan tan parecido que parece que comparten fluidos), no, no molaría que me hubiesen secuestrado en algún sitio de esos y os liberaran de mi presencia, jejeje, porque a pesar de todos los sitios que he visto, ya lo dije una vez, me quedo con Madrid, que tiene más cosas buenas que malas.

En fin, que si a eso le añades que ya tengo casa propia, que no me canso de hacer cosas nuevas, de asumir retos, y que sigo con la misma visión optimista de siempre, pues me alegro de seguir dando caña y de entrar con fuerza en el nuevo ciclo.

Ya lo dice el trabalenguas adaptado, treinta tristes tigres trigan trigo en un trigal. Vale, esto no tiene nada que ver con el resto, pero me apetecía ponerlo :-D

Bueno, y que nos vemos el jueves de copas!

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Rotura de peroné (V)

Jelou eguéin!!

Acabo de volver del médico, y en efecto, los pronósticos se van cumpliendo. Es decir, ya no tengo que usar ni muleta ni ortopedia, y de momento sigo sin poder correr, futbolear o patinar, pero sí puedo hacer natación.

El caso es que ahora lo que tengo que hacer es cargar el pie, darme largas caminatas, pero eso sí, sin coger vicio de cojear (eso me ha dejado claro que es muy importante) y que no haga movimientos bruscos.

También me ha mandado más ejercicios de rehabilitación para hacer durante media horeja en casa a diario, tipo mover el pie adelante y atrás, hacia los lados, en círculo, andar de puntillas, hacer punta-talón, y coger cosas con los dedos. En tres semanas, de vuelta a ver cómo voy, y para enero, quizá tenga el alta!

Y eso sí lo mejor, ya podré ducharme de pie, yuhuuuuu!!

Bueno, os dejo, a ver si esta tarde cojo el coche (también puedo por fin!!) y marcho a patearme tiendas de muebles, así mato dos pájaros de un tiro, ejercito un poco el pinrel y además preparo mi casita para irme a viviiiiir!!!

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viernes, 16 de noviembre de 2007

 

Rotura de peroné (IV)

Bueno, pues ya ha pasado un mes y cuatro días desde la lesión, y hoy he vuelto al médico y me han hecho otra radiografía.

Las buenas noticias son que todo va de lujo, la recuperación va por buen camino, y el doctor me ha dicho que me quite ya una muleta definitivamente, que me deje solamente la contraria a la pierna mala. Y que además, si puedo y me veo bien, que camine sin muletas, así que intentaré hacerlo por casa :-)

La rehabilitación también la empiezo desde ya, dos veces al día, durante media hora tengo que mover el pie en círculos, para ir recuperando flexibilidad en los tendones. La mala noticia es que hasta después de reyes probablemente no podré correr ni patinar, ni jugar al fútbol... En cualquier caso, es menos de lo que me esperaba yo, creía que rondaría por los 6 meses, así que no es tan malo, digo yo...

Bueno, habréis visto varias cosas en la imagen (por cierto, para ampliar, click sobre ella). La primera es que aparecen varios clips metálicos. No os asustéis, no es que me hayan puesto clavos ni nada, es la ortopedia, que me han hecho la radiografía con ella puesta. Otra cosa que podéis ver es que la rotura ya se va soldando, si comparáis con la otra radiografía que puse en un artículo anterior. Además, esta vez he incluido la radiografía lateral, en la que se aprecia mejor la jodienda.

En fin, que de momento, y después de 35 días, no he empezado el día con el "pie izquierdo", jejeje. Así que dentro de poquito ya me tendréis dando por saco de nuevo, nenes!

Ah, ¡y se me olvidaba! El bueno del doctor me ha dado cita para el próximo 2 ó 3 de diciembre, y para entonces dice que espera quitarme muletas, ortopedia y todo, así que peacho regalo de cumpleaños!! :-)

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martes, 13 de noviembre de 2007

 

Rotura de peroné (III)

Bueno, pues ya han pasado un par de semanas desde que me pusieron la ortopedia, y en unos días vuelvo al traumatólogo, a ver qué me dice...

Por de pronto, ya me doy mis paseítos apoyando un poco el pié, incluso el viernes y sábado pasado vinieron a buscarme mis amigos, fuimos a casa de otros colegas, y allí que me hicieron pasar un buen rato, variando las cuatro paredes entre las que llevo encerrado un mes. Gracias nenes!!

Lo que sí debería empezar a hacer es intentar caminar un poco con una sola muleta, pero joer, cada vez que lo intento es un infierno, porque, al igual que me pasó cuando empecé a apoyar con las dos muletas, tengo que aprender a andar. Supongo que debe ser algún recurso de la puta cabeza, que le dice al cuerpo algo así como "pierna pupa, apoyo causar hostia y dolor". Sino, ya me diréis cómo se le va a olvidar andar a alguien y hacerle aprender de nuevo dos veces...

Respecto a la rotura en sí, ya no me duele, pero sigo teniendo calambres de cuando en cuando, y los dolores musculares por no hacer ejercicio en la zona se dejan notar, pero espero que eso vaya pasando según avance en la rehabilitación. Lo que sí da por saco es que cuando intento estar un rato con el pie en el suelo, ya sea sentado o de pie, se he hincha el tobillo y no duele, pero sí es molesto.

Ah, otra cosa que ya he notado es la diferencia de musculatura en los gemelos, ahora podría partir nueces con el izquierdo, mientras que el derecho se ha quedado como pura chicha. En fin, lo bueno es que cuando vuelva a estar de alta tendré un buen motivo para salir a mi hora e irme a hacer ejercicio, jejeje...

En fin, que en unos días os contaré qué me dice el médico, a ver si acabamos pronto esta sucesión de artículos contándoos cómo se sobrelleva una lesión de este tipo.

¡¡Hasta pronto!!

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miércoles, 31 de octubre de 2007

 

Rotura de peroné (II)

Seguimos con la rotura, y hoy os contaré un infierno de cada día: el sueño y despertarse.

Pues sí, porque os preguntaréis qué mal pueden hacer esos dos apacibles, y a priori relajados actos. Sencillamente, el elemento común que comparten ambos, el estiramiento. Cuando estás a punto de caer rendido, si estás cansado, tus músculos involuntariamente se estiran, al igual que hace uno casi inconscientemente cuando se despierta.

¿Y qué ocurre por estirarse? Sencillo, lo primero, uno tiene que aprender a controlar a estirar su cuerpo por partes, porque no puedes estirar el músculo que recubre el hueso roto así como así... Y claro, a eso le juntas la atrofia de músculos y tendones debido a la incatividad, y te encuentras con que un estiramiento involuntario se convierte en espasmos. No sé si habrá alguna relación médica que apoye este razonamiento, pero cuando te dan espasmos en la pierna mala, joder, ves las estrellas.

Y a eso hay que sumarle el miedo a que algo se te haya vuelto a descogorciar. En fin, que hoy he pasado un día con dolorcillo, pero bueno, también le he echado un par de huevos, he pasado de ese miedo, he seguido los consejos del médico, y con ayuda de las muletas, ¡he dado por fin mis primeros pasos! :-)

Es un ejercicio que me recomendó el traumatólogo, no para comenzar la rehabilitación, sino para que no se atrofien más los músculos. Para la rehab todavía me quedan unas semanas y la preveo dolorosa... No llevo ni tres semanas inmovilizado, y ya he perdido la mitad del movimiento del pie, se ve que los tendones se han acomodado y habrá que darlos de sí de nuevo, lo que dicen que causa bastante dolor.

En fin, poquito a poco, y en un breve tiempo estaré haciendo el Plushenko de nuevo, nenes! Eso sí, de momento lo que sí os digo, es algo sorprendente, y es que ¡se me había olvidado andar! Parece mentira pero es cierto, cuando me he puesto con las muletas, no sabía cargar el peso, no sabía avanzar el pie y reclinar... espero que no se me haga muy duro el re-aprendizaje, jejeje.

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